Natalia Evangelista Yoga

Natalia

El yoga desde pequeña estuvo cerca de mi, y  fue hasta el 2012 que llamó mi atención, al ver los cuerpos tan tonificados de quienes lo practicaban. 

Gratamente me sorprendió el conocer que esta práctica me enseña a verme, tal como soy, y  sacar mi mejor versión, más tolerante, más confiada, más agradecida.

Me enamoré del yoga cuando descubrí que era una forma de sanarme a mi misma a través de su práctica, curó mis heridas más profundas, comprendiendo que el sufrimiento era una elección, recuperando mi poder personal, liberandome del papel de víctima.

Mi primer maestro Paco y también mis amigas me insistieron que compartiera esta maravillosa herramienta transformadora, y luego de muchas dudas, me atreví a formarme con RYT 200 de Ashtanga Vinyasa Yoga y desde entonces no he parado de formarme en varios estilos. RYT 300 Yin yoga está siendo mi nuevo amor.

La práctica de yoga es una experiencia holística, que integra todas las partes que nos conforman y están relacionada entre sí y nos  conforman como un TODO, que nos permite percibir las experiencias de la vida. Cuerpo, mente, emociones y espíritu. 

Al comprender este concepto entendí porque siempre me sentía atraída por los mundos energéticos, las terapias alternativas, el desarrollo personal y  que desde esta visión podía ver el porqué de determinadas conductas, enfermedades o situaciones que se repetían en mi vida.

Por ello en mis clases me gusta crear un ambiente dónde cada plano está cubierto, crear una práctica amorosa y a la vez desafiante, cuidando cada detalle. La meditación, las asanas, según la energía del día, la música (otra de mis pasiones) no puede faltar para  conectarnos desde la emoción, y terminar con una yoga nidra, con aceites esenciales y una armonización con cuencos de cuarzo.

El mejor regalo es recibir una sonrisa, y ver las caras de los alumnos al terminar la clase de yoga, para mi no tiene precio. 

Gracias a ellos sigo aprendiendo, gracias a ellos sigo disfrutando, gracias a ellos sigo creciendo.

Gracias a todos mis maestros y alumnos por acompañarme en este precioso viaje.

Gracias a mi familia y amigos por estar y apoyarme. 

Os amo